Les Valls Blanco

El trabajo desarrollado en la Figuera (Montsant) por Jaume Roca y los suyos es bien conocido por los amantes de las garnachas frescas y complejas. Allí, a más de 500 metros sobre el nivel de mar y con el viento del SO soplando, las garnachas se sienten cómodas y regalan toda su elegancia. Jaume, su mujer Montse y el resto del equipo de la bodega viven el viñedo con pasión y lo trabajan de manera ecológica y biodinámica, respetando al máximo el terruño y con las manos como su principal herramienta.

Consolidado ya el proyecto en la DO Montsant, Jaume encontró unos viñedos extraordinarios a poco más de hora y media de su Figuera natal, en la zona de Matarranya, en Teruel. Su valentía y determinación lo llevaron a empezar a trabajar estas viejas cepas que, pese a su escaso rendimiento, pronto empezaron a producir uvas de la más excelsa calidad. El pequeño pueblo de Arenys de Lledó ha visto como sus plantas de garnachas y macabeo se convertían en los nuevos vinos de Ficaria, auténticas maravillas como este Les Valls blanco, un monovarietal de garnacha blanca elaborado a partir de vides que alcanzan, en algunos casos, las tres décadas de edad.

De buena acidez (pomelo y lima) y aromas de fruta de hueso, combina el volumen habitual de la garnacha blanca con ciertos toques licorosos y balsámicos. Con algo de tiempo en la copa evoluciona hacia membrillo fresco y delicado licor de melón, hierba seca y piel de mandarina; se intuye un minúsculo rastro de carbónico en el trasfondo mientras una tensión extraordinaria ensalza la fruta y equilibra el volumen en boca. Complejo, cambiante a cada instante, personal y sutilmente amargo, recordando el tacto de las pieles y la cremosidad de las lías. Su recuerdo es muy largo y se debate entre la acidez, el amargor y el dulzor de la fruta.