Los viñedos de VBPO son concebidos como organismos autosuficientes. Esta filosofía implica la exclusión de productos químicos sintéticos, apostando en su lugar por preparados biodinámicos naturales que enriquecen el suelo y fortalecen las vides desde su raíz. Con el propósito de fomentar la biodiversidad, se cultivan especies vegetales nativas que actúan como cobertura del suelo. Estas plantas no solo protegen contra la erosión, sino que también crean un entorno propicio para organismos beneficiosos. Además, el compostaje biodinámico, elaborado de forma artesanal, potencia la microbiología del suelo y favorece la regeneración natural del viñedo. En la bodega, se mantiene un enfoque de mínima intervención. Se evita el uso de productos químicos y se controla cuidadosamente la adición de sulfitos. La fermentación se lleva a cabo con levaduras autóctonas, lo que permite que cada vino exprese de manera auténtica el terroir y la singularidad de cada cosecha.
