Glera
Según algunos expertos, se sabe que la glera ya existía en el Véneto en tiempos de los romanos. No hay que descartarlo, aunque lo que sí es seguro es que la historia de esta uva se concentra en la época más reciente: básicamente porque es la variedad con la que se produce el prosecco. El prosecco es un tipo de vino con un éxito espectacular, cuyas vendas comerciales han forzado la necesidad de extender los límites de producción legalmente permitidos hasta hoy para la zona clásica, el área de Treviso, a toda la región del Triveneto: todo el Véneto y una enorme parte del Friul. Como consecuencia, el cultivo de la glera se ha extendido muchísimo en toda esta zona, sustituyendo a otras cepas. Con un vigor admirable y una productividad constante, la glera es una uva no particularmente conocida por su acidez (tradicionalmente este déficit solía corregirse con aportes de la autóctona verdiso) pero sí con una buena capacidad de concentración de aromas y de azúcar en las áreas más aptas.

Bisol Valdobbiadene Superiore di Cartizze 2022

Varaschin Valdobbiadene Brut 1930


Bortolomiol Valdobbiadene Demi-Sec Suavis 2023

Bortolomiol Valdobbiadene Extradry Bandarossa 2023


Bortolomiol Valdobbiadene Brut Ius Naturae 2023
ECO

Bortolomiol Valdobbiadene Brut Prior 2023



Bortolomiol Valdobbiadene Extradry Senior 2023



Nino Franco Valdobbiadene Dry Primo Franco 2020

Foss Marai Valdobbiadene Extradry Strada di Guia

Ruggeri Valdobbiadene Extradry Giustino B. 2021


Col Vetoraz Valdobbiadene Sup. di Cartizze 2021


Bisol Valdobbiadene Dry Rive di Campea 2020

Col del Sas Valdobbiadene Brut Rive di Solighetto


Andreola Valdobbiadene Superiore di Cartizze



Marsuret Valdobbiadene Brut San Boldo

Canevel Valdobbiadene Superiore di Cartizze 2019

Astoria Valdobbiadene Brut Casa Vittorino 2020


Marsuret Valdobbiadene Extradry Il Soller


Masottina Valdobbiadene Brut Contrada Granda


Loredan Gasparini Valdobbiadene Xdry Casa Bianca


Glera
Según algunos expertos, se sabe que la glera ya existía en el Véneto en tiempos de los romanos. No hay que descartarlo, aunque lo que sí es seguro es que la historia de esta uva se concentra en la época más reciente: básicamente porque es la variedad con la que se produce el prosecco. El prosecco es un tipo de vino con un éxito espectacular, cuyas vendas comerciales han forzado la necesidad de extender los límites de producción legalmente permitidos hasta hoy para la zona clásica, el área de Treviso, a toda la región del Triveneto: todo el Véneto y una enorme parte del Friul. Como consecuencia, el cultivo de la glera se ha extendido muchísimo en toda esta zona, sustituyendo a otras cepas. Con un vigor admirable y una productividad constante, la glera es una uva no particularmente conocida por su acidez (tradicionalmente este déficit solía corregirse con aportes de la autóctona verdiso) pero sí con una buena capacidad de concentración de aromas y de azúcar en las áreas más aptas.
Existe una diferencia sustancial entre el prosecco de llanura, neutro y con un perfil aromático simple, y el de colina, más complejo y estructurado. La zona más apta son las colinas de Valdobbiadene, Conegliano y Asolo. Aquí se obtiene, de unos viñedos Patrimonio UNESCO de la Humanidad, un prosecco de color pajizo tenue, afrutado, con notas de miel y pera, hierbas aromáticas y flores del campo. Al paladar, además de la típica efervescencia, muestra un conjunto de sabores basados en notas sápidas, frescas, con una amabilidad potenciada por su habitual categoría de dosage (extra dry) o con menos azúcar residual, más terso y acorde al gusto moderno (brut). Se vinifica también sin burbujas, pero los vinos tranquilos son menos comunes, más simples y con una paleta de aromas delicada, para tomar como aperitivo, incluso las versiones de las colinas Euganeas conocidas con el nombre de serprino. En algunas zonas muy concretas puede encontrarse pasificada.
