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Daniel Vollenweider

Daniel Vollenweider

Daniel Vollenweider es originario de Suiza, del cantón de los Grisones concretamente, y fue una botella de Auslese de Egon Müller la que hizo que cambiara radicalmente de vida y se dedicara al mundo del...

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Uvas

Vino de Daniel Vollenweider

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Daniel Vollenweider

Daniel Vollenweider es originario de Suiza, del cantón de los Grisones concretamente, y fue una botella de Auslese de Egon Müller la que hizo que cambiara radicalmente de vida y se dedicara al mundo del vino. Empezó trabajando en una tienda de vinos, lo que le permitió conocer a muchísimos bodegueros, hasta que entró a trabajar con uno de ellos: Fromm. En la bodega Fromm, en Suiza mismo, empezó elaborando vinos de pinot noir pero pronto partió a la bodega que Fromm misma tiene en Nueva Zelanda, para hacerse cargo de los viñedos de riesling. Enamorado de esta variedad, decidió regresar al continente europeo e instalarse en la región donde se encuentra el verdadero corazón de esta uva: el Mosela.

Instalado en el Mosela, Daniel Vollenweider trabajó como aprendiz al lado de uno de los más grandes productores: Ernst Loosen (Dr. Loosen), en Wehlen, y con el tiempo logró adquirir unos viñedos en la localidad de Wolf, en el histórico viñedo Goldgrube ('mina de oro'), una zona del Mosela que cuenta con viñedos excelentes que iban siendo abandonados poco a poco en los años 90 a causa de la gran dificultad que representa el cultivo en laderas tan empinadas, sobre suelos de pizarra gris (y algunas vetas de pizarra rojiza) y con escasísimas producciones. Vollenweider es uno de los viticultores que está consiguiendo la reactivación de la zona. La bodega se encuentra en la vecina localidad de Traben-Trarbach, donde elabora con depósitos de acero inoxidable y fudres; su primera añada fue la 2000, rápidamente elogiada por la crítica internacional.

Daniel Vollenweider elabora los vinos dulces y semidulces clásicos de la región, pero también secos (un 50% de la producción), siempre bajo una filosofía de intervención mínima, potenciando el trabajo en el viñedo, buscando la máxima madurez y calidad de la uva, y preservando esa acidez intrínseca de la variedad que dará largos años de vida a los vinos. Los vinos de Daniel Vollenweider son vinos muy personales, honestos y sin maquillajes; ofrecen la esencia del viñedo y las particularidades de cada añada.

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