Clàssic Penedès y Corpinnat son dos agrupaciones de elaboradores de espumosos catalanes que decidieron separar sus caminos de los de la DO Cava, los primeros allá por 2014 y los segundos más recientemente. La voluntad en ambos casos ha sido la misma, poner en valor el origen de sus uvas y la calidad de sus vinos.
Toda la fruta empleada en la elaboración de ambos vinos es 100% ecológica y del Penedès. Las crianzas mínimas para sus espumosos se fijaron en 15 meses para Clàssic Penedès y en 18 para Corpinnat. Entre ambas organizaciones no llegan a las 30 bodegas, pero todas tienen un discurso común y productos de gran calidad. A diferencia de lo que sucede con la DO Cava, que ampara vinos de diversas comunidades autónomas, CP y Corpinnat tan sólo trabajan con uvas del Penedès, región histórica de los espumosos catalanes. Del mismo modo, se apuesta con firmeza por las largas crianzas que indirectamente afectan al precio de los vinos y por tanto a la imagen de calidad proyectada. La DO Cava acoge productos de todos los segmentos de precio, desde vinos de diario de muy bajo coste, hasta auténticas joyas de muy alta valía; Clàssic Penedès y Corpinnat, por su parte, apuestan únicamente por precios medio-altos, con la clara voluntad se posicionar sus vinos en el segmento de calidad del mercado.
Con todas estas similitudes, parecía lógico pensar que ambas agrupaciones pudieran aunar esfuerzos para remar en la misma dirección y, efectivamente, parece que en un futuro no muy lejano podría ser así. Se sabe que Clàssic Penedès y Corpinnat están negociando la creación de una nueva DO de vino espumoso del Penedès, pero se tiene también muy claro que el proceso puede alargarse aún un par de años. Una vez cerrados todos los acuerdos entre ambas partes, el proyecto debe ser aprobado por la Generalitat y por el Ministerio de Agricultura, que es el competente en esta materia.